Masa quebrada
- Batir la margarina Bonella con el azúcar por 5 minutos, luego agregar el huevo, la yema y, enseguida la harina, mezclar hasta obtener una masa que no sea tan homogénea. Recordar que es una masa quebrada y se podría tener dificultades en el estiramiento si se la trabaja con demasiada fuerza.
- Apartar la masa y llevarla al congelador; de preferencia extenderla lo más fina posible, para que rápidamente congele y, luego poder trabajar.
Crema de almendra
- Batir de 4 a 5 minutos la margarina Bonella con el azúcar, luego agregar los huevos uno a uno, la harina y el polvo de almendra. Mezclar todo bien hasta obtener una masa que sea lo suficientemente ligera y reservar.
Para armar la tarta
- Retirar la masa quebrada del congelador, poner un poco de harina sobre el mesón y estirar con un rodillo.
- Poner en el molde, extender la masa a un medio milímetro de grosor. Luego que ya está la masa en el molde, agregar la mermelada de frutilla extendiéndola en toda la superficie.
- Agregar la crema de almendra que se tiene apartada, llenando en el molde hasta las tres cuartas partes; encima de la crema se pondrán las almendras, las nueces y los pistachos hundiéndolos ligeramente con la ayuda de un cubierto, sin que estos lleguen hasta el fondo.
- Llevar al horno a una temperatura de 160 °C por 25 a 30 minutos.